domingo, 29 de agosto de 2010

EL ORIGEN ROMANO DE BUDAPEST ( HUNGRÍA )

Muchos turistas que se acercan a la capital húngara, Budapest, no conocen la existencia de las ruinas romanas que atestiguan el origen de esta bella ciudad, pues se encuentran algo alejadas de los circuítos turísticos de se realizan por el centro e inmediaciones de la misma. El origen está la denominada ciudad de Aquincum.

Como toda ciudad romana, el origen de la misma fue un campamento militar, que poco a poco, se fue consolidando como urbe que llego a tener gran importancia, poseyendo notorios edificios públicos, como el anfiteatro, que es el conjunto arqueológico de esta ciudad, que se encuentra más cercano del centro actual de Buda. Quiero agradecer a Fred y Barbara Andernach, que me acompañaran a esta visitarla.

Comenzada a excavar a finales del siglo XIX, fue consolidada y restaurada entre 1970 y 1980. Fue en su momento uno de los mayores parques arqueológicos abiertos al público, por la superficie excavada y los trabajos de consolidación y restauración realizados en aquellos tiempos. Así podemos ver, numerosas calles empedradas, casas de diferentes tipologías, algunas con baños termales y restos de canalizaciones y otras infraestructuras públicas. En la actualidad posee un pequeño pero muy interesante museo, en el que se exhiben las más importantes piezas localizadas durante las excavaciones, aprovechando para mostrar al visitante los momentos anteriores a la ocupación romana y los posteriores, hasta llegar a la Edad Media.

En wilkipedia podemos leer: “La antigua ciudad romana de Aquincum se encontraba en el borde noreste de la provincia romana de Panonia. Las ruinas de la ciudad se pueden ver hoy en día en las afueras de Budapest, capital de Hungría. Se cree que Marco Aurelio pudo haber escrito al menos parte de su libro Meditaciones en Aquincum. Este asentamiento fue originalmente un poblado celta que posteriormente sirvió como destacamento militar en el sistema romano de protección fronteriza, más conocido como "limes". Entre los años 41 y 54 d. C., un regimiento de caballería de 500 hombres estuvo destacado en este fuerte. En el año 89 d. C., a este regimiento se añadió una legión de 6.000 hombres, pertenecientes a la Legio II Adiutrix. Alrededor del fuerte, gradualmente fue creciendo una ciudad, que tras la reorganización del territorio realizada en el 106 d. C., se convirtió en la capital de Panonia Inferior. A finales del siglo II, esta ciudad contaba con casi 40.000 habitantes, ocupando el actual distrito de Óbuda, dentro de la actual Budapest. Esta ciudad contaba con todas las comodidades y adelantos propios del Imperio romano, contando sus habitantes con calefacción, baños, palacios públicos y un anfiteatro para eventos locales. En el año 376 cayó en manos de los vándalos.

Nota.- En las fotografías, de arriba hacia abajo: restos del anfiteatro romano de Budapest; panorámica parical dde las ruinas de Aquincum, pudiéndose observar al fondo, las extensas instalaciones de almacenamiento y exhibición de inspciones latinas; un detalle del yacimiento, con un instrumento especial, que ofrece una visión recreada del mismo, al ver através del mismo; y otro detalle de una estancia de una habitación de una casa romana, en la que se puede ver, como delimitaron en el muro de la misma, la parte consolidada y añadida, para distinguirla de la original.